Estoy segura que Caperucita no llevaba en su canasto comida para su abuela sino jabones. Jabones a juego con su caperuza, para darle las gracias a su abuela por su cariño y apoyo incondicional. Bueno y tambien para lavarse, masajearse y quedar suavemente perfumada por unos jabones hechos con dedicación.
Gracias a todas las amigas-abuelitas que ayer conocieron mi blog y me animaban a seguir adelante.
Y a mi familia que me animaba incluso antes de empezar.
Preciosos jabones rojos... me encantan.
ResponderEliminar